Cada día aparece una nueva palabra de moda en el mundo del marketing. Sin embargo, hay una palabra que es intemporal y más importante que nunca. Esa palabra de moda es “narración”. Estamos obsesionados con ella y está alimentando el juego de los contenidos.
El marketing consiste en contar buenas historias.
El marketing
consiste en conseguir que sus clientes cuenten la historia por usted.
Las historias son poderosas y memorables. Casi todo lo que sabemos nos ha sido dado en forma de historia.
Las buenas historias alimentan las conversaciones y permiten que su empresa se convierta en una fuente de confianza.
Entonces, ¿cómo se llega a ser un buen narrador?
- SEA REAL – Asegúrese de que su historia refleja que es una empresa formada por personas reales, que se comunica con personas reales. Habla como un ser humano que se preocupa por entablar relaciones significativas con la gente. La claridad es más importante que las palabras rimbombantes.
- DÍGALO CON BUENAS FOTOS – Merece la pena invertir en un fotógrafo profesional para que haga fotos de su oficina, su equipo y sus productos o proyectos. La fotografía de archivo tiene su lugar, pero nunca funcionará tan bien como las fotos de su negocio en la vida real. Las fotos permiten que la gente te conozca y son un gran complemento para tu blog y tus canales en las redes sociales.
- COMPARTA SU VISIÓN Y PROPÓSITO – Comparta su “POR QUÉ” tanto como su “QUÉ”. No se limite a promocionar sus productos o servicios. Comparte con la gente por qué haces lo que haces. A sus clientes les importan tanto las personas que hay detrás de su empresa como el producto o servicio que ofrece.
- HAGA QUE SU CLIENTE IDEAL SEA EL HÉROE – Utilice una historia para conseguir que su público objetivo desempeñe un papel activo en el uso de su producto o servicio. Todas las historias tienen héroes y, por lo general, el héroe es el personaje más querido. Cree una historia que describa el viaje de su cliente para resolver un problema al que se enfrenta y convierta a ese cliente en el héroe de la historia.
Ahora que conoce el poder de la narración, puede reproducir el mismo efecto cuando incorpore historias a sus contenidos.
Se necesita práctica para ser un experto narrador, pero al final te darás cuenta de que merece la pena.
